Ya va la segunda persona que me relata un suceso de que en una Marco Polo han sido forzadas las ventanillas correderas para entrar a robar. Y los dos casos en verano. Parece ser que es el talón de Aquiles de esta carrocería, su punto más débil.
En otras ocasiones lo que puede suceder es simplemente que se nos olvide comprobar si el famoso cierre de doble botón ha hecho correctamente su click final.
Por tanto, una manera interesante de bloquear el desplazamiento y evitar que nos las abran para entrar en la furgo sería hacer unas piezas de madera, PVA o PVC con la forma exacta del carril por el que se mueven.
En las que no olvidaremos hacer una muesca para poder ponerlas y quitarlas fácilmente usando un dedo.
Luego simplemente las tratamos con selladora sintética
y las esmaltamos con un spray del color de los marcos para que no se noten ni desde dentro ni desde fuera.
Ponerlas y quitarlas es de extrema sencillez
Fuente: Foro 4×4 – Viano